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Los diferentes derivados del cannabis ya sean los psicoactivos (THC) o los no psicoactivos (CBD) influyen en diferentes sistemas del cuerpo, uno de los cuales es el sistema endocannabinoide o SEC por sus siglas en español.
Pero ¿qué es el SEC?
El sistema endocannabinoide es un sistema formado por un grupo de receptores endógenos que se localizan en el cerebro de los mamíferos (si, de todos) y a través de los sistemas nerviosos central y periférico. Están constituidos por lípidos neuromoduladores y sus receptores.
El SEC está involucrado en una gran variedad de procesos fisiológicos como son el apetito, el humor y la sensación de dolor, entre otros. Apenas en 1990 se identificó el primero de estos receptores: CB1 y en 1993 el CB2.
Los receptores CB1 se concentran principalmente en el cerebro, hipocampo, corteza cerebral, ganglios basales, hipotálamo y amígdala, es decir, se encuentran en las regiones responsables de procesos mentales y fisiológicos como la memoria, coordinación motora, el apetito, percepción del dolor y emociones. El Tetrahydrocannabinol (THC) está especialmente ligado a estos receptores, de ahí su función psicoactiva.
Los receptores CB2 se concentran en el sistema inmune y el sistema nervioso, pero también en el intestino, en el bazo, el hígado, el corazón, los riñones, los huesos, vasos sanguíneos, células linfáticas, glándulas endócrinas y órganos reproductores. El Cannabidiol (CBD) está ligado particularmente a estos receptores, de ahí su función homeostática y de bienestar general.
Funciones en las que influye SEC:
El CBD usado continuamente contribuye a la regulación y bienestar general del cuerpo humano a través del Sistema Endocannabinoide y sus receptores asociados. Diferentes padecimientos ven sus síntomas reducidos significativamente cuando se usa como coadyuvante de tratamientos médicos convencionales.
